"La utopía está en el horizonte. Camino dos pasos, ella se aleja dos pasos y el horizonte se corre diez pasos más allá. Entonces...¿para qué sirve la utopía? La utopía sirve para eso, para caminar."

jueves, 29 de mayo de 2014

Carmen.

"Guitar", by Bersty en deviatart.com
Enamorarse no es algo como para colgarse medallas. Lo realmente difícil, es salir de una historia de amor igual que entraste.

Uno puede, por ejemplo, enamorarse del sueño que descansa en tus pestañas, o de la parte que queda al descubierto de tu nuevo vestido verde, o de las cosas que tienes en común con mi guitarra. Y en un abrir y cerrar de ojos, a los relojes les entran las prisas, y tardas en llegar lo mismo que el olvido en salir. Y yo con esta tonta memoria que no me deja olvidar.

Y cuando las cosas parecen ordenarse, como un puzzle de hojas de otoño, llega la luz haciéndome borrar todo lo que vi en la oscuridad. Y el sueño de tus pestañas ya no me deslumbra. Y tu vestido verde está esperando a que la lavadora borre todo rastro de mi olor. Y mi guitarra ya no te tiene celos, ahora vuelvo a ser sólo suyo.



Definitivamente, no. Uno no sale de una historia de amor igual que entró. 

2 comentarios:

  1. Ya nunca volverás a ser el de antes.
    Y en el aire una nube que sube, que sube...
    y te quedas mirando mientras se aleja y se va.
    Cambias de dirección y aprendes a caminar sin mirarte los pies.

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    1. El cambio, el desafío de verdad
      es dejar de ser dueños
      empezar a ser sueños
      y no necesitar, como bien dices, mirarse los pies.

      Gracias por tu comentario.

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